Las carpas para el frío son, en estas fechas, uno de los productos por los que más preguntan las personas que se ponen en contacto con nosotros. El frío es uno de los temas que más preocupa a los clientes cuando hablamos de carpas. Lógicamente los usuarios necesitan saber si cuando coloquen la carpa en el jardín de casa o para los empresarios de hostelería, si a la hora de montar la carpa para la terraza del bar, van a tener frío y si la carpa va a solucionar ese problema climatológico. Ya se sobreentiende que la carpa soluciona la lluvia. Pero de cara al frío podemos explicar ciertas cosas que ayudarán a entender mejor como funciona el acondicionamiento para el frío en una carpa.
¿Cómo aislar las carpas para el frío?
Debemos empezar pensando en cómo funciona el frío y el calor generalmente. Esto es algo muy sencillo. El frio se mantiene abajo y el calor se mantiene arriba. Por eso solemos tener los pies frío en invierno y si estamos en una casa de varios pisos, siempre en el último piso o en el altillo hace más calor que en el resto de la casa. Ahora que ya sabemos esto, podemos plantear lo que pasa en una carpa con el frío. La carpa tiene la ventaja de que es fácilmente desmontable. Por eso se utiliza en eventos y fiestas, además de que no es necesario pedir grandes permisos. Eso que es tan bueno, es malo cuando comparamos este aislante con un aislante para una edificación. Para que lo entendamos, una carpa no es un edificio. En consecuencia, lo que no podemos pretender que aísle del frío del mismo modo.
El techo de la carpa para el frío es difícilmente aislante, porque es una lona o PVC. Puede tener más o menos gramaje del PVC, pero no deja de ser una tela gruesa. Cuando se compra la carpa, se puede pensar en poner en el interior un doble techo con cierto aislante. En cualquier caso, nunca será como una edificación.
Los laterales de la carpa, las cortinas son más fáciles de aislar. Se pueden poner cerramientos de diferentes materiales, desde vidrio hasta paredes totalmente cerradas con algún tipo aislamiento térmico. Todo dependerá del precio que queramos pagar. También del tipo de carpa que queramos instalar. Por ejemplo, si la carpa es una grande para almacén, probablemente no valdrá la pena aislar la carpa. Salvo, obviamente, que la mercancía almacenada sea muy sensible al frío.
¿Todas las carpas son válidas para usarse como carpas para el frío?
Evidentemente, no. Si queremos una carpa para hostelería en invierno con frío, tendremos que pensar si vamos a querer que nuestros clientes pasen frío o no. Por eso tendremos que valorar las diferentes carpas. Por ejemplo, la carpa tensada para el frío no es una buena solución. En cambio la carpa tipo jaima para el frío funciona perfectamente bien. La carpa grande para el frío también es recomendable, aunque en ambos casos hay que acondicionar los laterales.
Siendo consciente de lo que ya hemos comentado al principio de este post, esto es, que las carpas no siempre acondicionarán igual que una edificación, si entendemos bien esto, hay muchas soluciones para que la carpa se pueda cerrar y acondicionar sin grandes problemas.